Querido cuerpo…

Perdóname. Mis miedos te hacen daño. Estoy cansada. Soy injusta contigo… me enceguece el dolor que he pasado y no veo cómo lanzo cuchilladas al aire que acaban hiriéndote a ti, mi cuerpo.

Sé que quieres tocar, que te toquen, mostrarte, hablar con otros cuerpos, quieres que yo te viva, que recorra las vías que me pasas ofreciéndome… pero me siento chiquita, me siento inválida y me escondo. Me dicen un plan bonito como una sesión de fotos y acabo pateando el tablero con ansiedad. Me muero por bailar y me lo prohíbo.

Ayúdame a quitarme tanto dolor y tanto miedo. Te lo suplico.

Me jode y lloro, porque avanzamos, no es que no lo hagamos… pero tantas veces me siento que necesito sentarme en una piedra al lado del camino a descansar. Sé que vas con paciencia conmigo, pero tantas veces me parece que todo va tan deprisa… y me da miedo no llegar, que se me acabe el tiempo…

Me siento culpable por no haberte hecho caso antes o de no haberte protegido de tantos ataques… o de haberte atacado yo. Perdóname, por favor.

Quiero aprender a ver la vida con tus ojos, cuerpo mío. Estoy cansada de jugar a ser un ángel: quiero solo ser humana, una más. Ayúdame. Ayúdame a buscar el placer, a equivocarme, a dejarme llevar, a no encerrarme… a arriesgar un poco y lanzarme a la aventura…

Quiero recorrer el camino que me señalas.

Por favor ❤️‍🔥